La producción de Aceite de Oliva y su comercio es uno de los buques insignias de nuestro país, además de la tradición cultural que siempre nos ha aportado en nuestro día a día.
La producción del Aceite de Oliva se remonta a la época del Creciente Fértil (4000 a. C), área antigua e histórica que abarcaba desde el levante mediterráneo (oriente próximo) hasta el norte del golfo pérsico, lugar donde se originó la revolución neolítica en Occidente. Aun así hay que señalar que se conoce la existencia de uso del olivo desde la época del Paleolítico superior (12000 a. C.).
En época egipcia se comenzó a utilizar el Aceite de Oliva con usos cosméticos, algo que hoy en día sigue vigente, así como su comercio, llegando su cultivo a Grecia hacia el 2500 a. C. y surcando el mediterráneo años más tarde con los fenicios, ya en el siglo XI a. C.
A día de hoy, España es la primera potencia mundial productora y exportadora, con una superficie dedicada al olivar que ronda los 2,5 millones de hectáreas, según datos de La Interprofesional del Aceite de Oliva Español.
Pero no sólo en España, la fabricación del Aceite de Oliva es base de la dieta mediterránea y un símbolo de cultural e histórico del área de influencia mediterránea. Sólo el 3% de la producción mundial es elaborada fuera del área mediterránea.
El sector de la elaboración del Aceite de Oliva representa el 5% de las empresas agroalimentarias españolas y el 9% de las exportaciones de productos agroalimentarios, una cifra que va en aumento a ritmo elevado.
Actualmente, la producción de Aceite de Oliva sigue siendo casi totalmente mediterránea, aunque también hay productores externos como Argentina, Estados Unidos o Chile, entre otros.
Si finalmente, nos acercamos a nuestra tierra vemos que en Andalucía se produce el 85% del Aceite de Oliva Español y el 32% a nivel mundial. La variedad Picual o Marteña, representa el 20% de la producción mundial y 50% de la nacional.
Y ajustando más, en Jaén contamos con 550.000 hectáreas de olivar en la provincia y más de 66 millones de olivos, Con los que generamos el 20% de la producción mundial de Aceite de Oliva.
